La estructura, contenido, significado original y la aplicación moderna de Mateo, Marcos, Lucas, y Juan.
Los primeros cuatro libros del Nuevo Testamento — Mateo, Marcos, Lucas, y Juan — son comúnmente conocidos como «los Evangelios». Estos libros explican la vida y enseñanzas de Jesús, y son la base para la mayoría de las distintivas doctrinas del cristianismo. Pero ¿cómo los cristianos interpretan y aplican estos libros hoy? ¿Por qué tenemos cuatro diferente relatos de la vida y las enseñanzas de Jesús? ¿Acaso estos libros pretendían describir una historia verdadera? ¿Que tan relevante son los puntos de vista de estos libros en el mundo moderno?
Objetivos del Curso:
La misión de Third Millennium Ministries es la de preparar a líderes cristianos para transformar el mundo para el Reino de Dios al proporcionar educación bíblica, en cinco idiomas principales, de manera gratuita.
Su mayor prioridad es la de difundir la voluntad de Dios en cada rincón de la tierra a través del evangelio de Cristo. Por esta razón, Third Millennium Ministries está preparando un currículo de educación bíblica exhaustivo para líderes cristianos de todo el mundo, en sus propias lenguas, para sus países, y totalmente gratis.
El plan de estudios ha sido diseñado para usarse como apoyo a escuelas ya existentes, así como a grupos e individuos. Consiste en tres elementos principales: videos gráficos, instrucciones escritas, y recursos de internet.
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Esta lección explora el carácter literario de los Evangelios, su posición dentro de la iglesia, y la unidad y variedad en ellos
Mateo escribió el primer evangelio para explicar que Jesús era el rey de los judíos que trajo el reino de los cielos, a pesar de que Jesús no llegó de la manera en que la gente lo esperaba.
La persecución de los cristianos estaba en la mente de Marcos cuando escribió el segundo evangelio. Marcos contó la historia de la vida de Jesús de forma tal que fortaleció la fe de los antiguos cristianos y los motivó a perseverar a través del sufrimiento.
Lucas describió a Jesucristo como el que nos salva. La humanidad está perdida y desesperada, sin ayuda ni esperanza, en necesidad de salvación. El tercer evangelio nos recuerda que Jesús murió para salvarnos.
Juan escribió el cuarto evangelio para asegurarles a los creyentes judíos perseguidos de que Jesús era el cumplimiento a las antiguas promesas de Dios hechas a los judíos, que Jesús realmente es el Cristo, el Hijo de Dios. Juan quería asegurarse que se mantuvieran fieles a Jesús y que disfrutaran la vida abundante en Él.
